DECRETOS

Es el inicio de un ciclo más; el número 23.
Si reviso el ciclo 22 la cuestión más repetida es: ¿Por qué?¿Por qué?... yo¿Por qué?... a mí¿Por qué?... ahora¿Por qué?... tan poco¿Por qué?... tanto¿Por qué?... no¿Por qué?... gorda¿Por qué?...flaca
¿Por qué?... soltera¿Por qué?...sufrir
¿Por qué?...así
¿Por qué?...¿Por qué?...¿Por qué?
En el obligado recuento anual descubrí la interminable lista de "porqués" y me aterré. Mi ciclo 22 se fue haciendo una y otra vez la misma pregunta. El ciclo 22 se resume en "Quejas".No es posible vivir así.

Alguien, dijo que, "lo que de nuestra boca sale, hace eco en el universo". Supongo que hablaba de energía, la energía que mueve al cosmos; nos entra en el cuerpo a través del aire cuando respiramos, nos nutre, se nutre... de lo que llevamos dentro, se fortalece y con tal fuerza sale de nuestro cuerpo cuando escupimos energía al hablar. Se dispersa en el entorno y comienza a avanzar hacia el universo, pasea, se fortalece con polvos estelares y vuelve a su origen como meteoro flameante.
Por eso dicen que debemos cuidar lo que de nuestra boca sale. Supongo esa es la razón de que en el ciclo 22 perdiera mucho incluso ganas.
Decretar es el ciclo 23. Este ciclo es de completa prosperidad. Vienen éxitos, buena vibra, buena vida.
Hay que hacerlo. Decreta lo que deseas. Decreta lo que sueñas, hará eco y volverá pronto a ti con más fuerza de la que lo digas.
Por hoy, esto quiero decir.